martes, 5 de octubre de 2010

Soy feliz como una perdiz

Ando pegando botes por el trabajo como una niña con zapatos nuevos.

Ayer llegué tarde y resulta que, aunque estaban avisados: me han echado de menos!!!!

Y yo que soy una tonta, cuando te viene un amigo tras otro y te llama, te manda un mail o se te planta directamente en el despacho porque: "no estabas..."

Que me siento tan afortunada por semejantes manifestaciones de cariño desmerecido que me paseo por el trabajo con una sonrisa de oreja a oreja realmente impropia...después de todo, estoy trabajando!!

Pero jo....que me echaron de menos....

Les voy a hacer un bizcocho!

5 comentarios:

SOMMER dijo...

No sería que te querían dar curro ¿no?

Bueno, seguro que no...
Yo también te echaría de menos.

Besitos

raindrop dijo...

Estoy seguro de que tu ausencia deja vacíos muy notorios, lo mismo que tu presencia huellas indelebles.
Son las consecuencias de ese atractivo personal que tú tienes :D

besos

ybris dijo...

Es que eso de echarle a uno de menos es conmovedor.
Tanto como es desastroso que le echen a uno de más.
O. aún peor que la ausencia o la presencia sean indiferentes.

Lo tuyo debe de ser tan cierto como previsible a juzgar por lo que también se te echa de menos aquí cuando desapareces.

Besos.

Sofía B. dijo...

¿Qué ha sido del bizcocho?
¿Llego tarde?

Besos

Bego dijo...

pero como no t van a echar d menos!! ni a ti ni a los bizcochos, intuyo